Son las tres de la tarde ahora mismo y no sé porqué pero he sentido la necesidad de presentaros a alguien:
A mi ciudad,
Vigo.
La verdad es que me encanta donde vivo, la zona, sus gentes, su mar, sus playas, sus montes,... Os he preparado alguna información por si alguno de los que no sois de aquí os entre el gusañillo y nos visiteis. Jamás os arrepentiréis. Espero que os guste.
La ciudad
La ciudad de Vigo está situada en la más meridional de las Rías Baixas protegida por las islas Cíes, archipiélago de singular belleza que forma parte del Parque Natural de las Islas Atlánticas. El entorno en el que se encuentra la ría de Vigo proporciona unas condiciones climáticas muy favorecedoras, con temperaturas medias anuales que rondan los 15º C y, contra todos los tópicos, con la mitad de los días del año soleados. En el área metropolitana de Vigo residen alrededor de medio millón de habitantes, que conforman la capital económica del sur de Galicia. En el desarrollo económico de Vigo tienen un peso específico el Puerto y la Zona Franca, en la que está establecida Citroën, factoría que da empleo a casi 10.000 trabajadores.
Historia de Vigo
Aunque apenas quedan vestigios, los primeros asentamientos humanos en la ciudad de Vigo pertenecen al neolítico; de las épocas anteriores, -Paleolítico y Mesolítico- se tiene constancia de presencia humana a partir de los instrumentos y herramientas hallados en algunas zonas de la ciudad; de la Edad del Bronce son relevantes los petroglifos hallados en varias parroquias; tienen singular importancia los abundantes restos de la cultura castreña y de toda la etapa romana localizados tanto en el núcleo urbano como en sus alrededores y que revelan que las relaciones comerciales por mar proceden ya de esa época.
Desde la Edad Media las costas viguesas recibieron las constantes incursiones de piratas procedentes del Norte de Europa, un fenómeno que dificultaba su crecimiento y el consiguiente desarrollo económico. La pequeña villa de Vigo, siguiendo una constante en la sociedad gallega, dependía del poder religioso.
El crecimiento de la ciudad se inicia en el siglo XII, aunque su desarrollo económico era muy inferior al de otras poblaciones como Bayona y Redondela, que podían comerciar por mar con otras villas por decisión real. Esta situación no se solventa hasta el siglo XVIII, cuando desaparece el monopolio de algunas ciudades sobre el comercio marítimo.
La economía de la Ría de Vigo debe a la riqueza de sus aguas, donde la sardina se reproducía de forma muy notable, los factores desencadenantes de su desarrollo. Si a las acciones de piratas y corsarios unimos los desastres de la peste podremos entender que tanto el comercio como la pesca y la artesanía tuvieron una errática evolución hasta que en el siglo XVI los armadores de la ciudad consiguieron de la corona la patente de corso
En este contexto histórico tiene lugar la Batalla de Rande (1702), en la que la flota formada por ingleses y holandeses se adentra en las aguas de la ría para hacerse con los tesoros que traía la Flota de la Plata española desde América (a la que asistía la armada francesa), cruento episodio que ha perpetuado Vigo en los libros de historia.
Vigo estaba rodeada por una muralla que la defendía y se abría a siete puertas: Falperra, Berbés, Mar, Laxe, Gamboa, Sol y Placer, que se derruyeron en 1869 para favorecer su expansión.
La oreografía gallega, entre otras circunstancias, provocó el aislamiento secular de las poblaciones y aunque las comunicaciones resultaban dificultosas, con la llegada de comerciantes e industriales catalanes y vascos, atraídos por la riqueza pesquera de las costas, a mitad del siglo XVIII, se inicia el despegue económico relacionado con la pesca y sus derivados. Paralelamente se inicia una lenta mejora de las comunicaciones al realizarse la carretera que lleva a Castilla, un muelle pétreo y con la implantación del ferrocarril en la década de los sesenta del siglo XIX.
Todos los años en Vigo se celebra la fiesta de la Reconquista, en la que se conmemora el levantamiento de los ciudadanos con el fin de expulsar al ejército francés en 1809.
En la segunda mitad del siglo XIX se inició el proceso de crecimiento definitivo de la ciudad. La arquitectura fue el espejo del desarrollo económico, donde se reflejaba la importancia de las transacciones económicas con América en las viviendas de la alta burguesía situadas en las principales avenidas, iniciándose un crecimiento vertiginoso de la población.
El puerto de Vigo, hoy en día unos de los principales puertos pesqueros de Europa, fue el punto del que partieron miles de gallegos que emigraron a América.
Qué visitar en Vigo
Dentro del término municipal de Vigo se pueden observar paisajes de mar y montaña, restos del legado histórico y del definitivo crecimiento de la ciudad a partir de la década final del siglo XIX, momento en que la ciudad conforma una fachada pétrea que la identifica hoy día.
El crecimiento definitivo y la trasformación en gran ciudad comenzaron a fraguarse hace cincuenta años, al convertirse Vigo en foco de los procesos de industrialización intensiva. Podemos distinguir dos tipos de visitas posibles según la clase de recorridos que se quieran hacer: una orientada a conocer el paisaje natural (la ría, las playas o los parques forestales que rodean la ciudad), y otra dirigida a visitar sus principales construcciones y lugares de especial relevancia:
Patrimonio natural
Vigo está rodeada por un anillo de parques forestales, entre los que destacan los de Beade, Valadares, Bembrive, Zamáns, o Candeán. En pleno centro urbano se encuentran los parques de O Castro, A Guía y A Riouxa. Desde ambos se disfruta de magníficas vistas de la ría y una cuidada selección de especies arbóreas. Otro parque urbano ligado a la historia de la ciudad es el Parque de Castrelos o Quiñones de León, que contiene jardines históricos y un pazo, legado a Vigo por la familia propietaria a principios del sigo XX.
Es posible recorrer a pie grandes tramos del litoral: de Bouzas a Alcabre, donde nos encontramos el Museo del Mar, para a continuación llegar a Samil, la playa urbana por excelencia. El paseo puede continuar hasta llegar a la playa de O Vao, un ejemplo de recuperación de flora y fauna marítima.
La ciudad de Vigo está situada en la más meridional de las Rías Baixas protegida por las islas Cíes, archipiélago de singular belleza que forma parte del Parque Natural de las Islas Atlánticas. El entorno en el que se encuentra la ría de Vigo proporciona unas condiciones climáticas muy favorecedoras, con temperaturas medias anuales que rondan los 15º C y, contra todos los tópicos, con la mitad de los días del año soleados. En el área metropolitana de Vigo residen alrededor de medio millón de habitantes, que conforman la capital económica del sur de Galicia. En el desarrollo económico de Vigo tienen un peso específico el Puerto y la Zona Franca, en la que está establecida Citroën, factoría que da empleo a casi 10.000 trabajadores.
Historia de Vigo
Aunque apenas quedan vestigios, los primeros asentamientos humanos en la ciudad de Vigo pertenecen al neolítico; de las épocas anteriores, -Paleolítico y Mesolítico- se tiene constancia de presencia humana a partir de los instrumentos y herramientas hallados en algunas zonas de la ciudad; de la Edad del Bronce son relevantes los petroglifos hallados en varias parroquias; tienen singular importancia los abundantes restos de la cultura castreña y de toda la etapa romana localizados tanto en el núcleo urbano como en sus alrededores y que revelan que las relaciones comerciales por mar proceden ya de esa época.
Desde la Edad Media las costas viguesas recibieron las constantes incursiones de piratas procedentes del Norte de Europa, un fenómeno que dificultaba su crecimiento y el consiguiente desarrollo económico. La pequeña villa de Vigo, siguiendo una constante en la sociedad gallega, dependía del poder religioso.
El crecimiento de la ciudad se inicia en el siglo XII, aunque su desarrollo económico era muy inferior al de otras poblaciones como Bayona y Redondela, que podían comerciar por mar con otras villas por decisión real. Esta situación no se solventa hasta el siglo XVIII, cuando desaparece el monopolio de algunas ciudades sobre el comercio marítimo.
La economía de la Ría de Vigo debe a la riqueza de sus aguas, donde la sardina se reproducía de forma muy notable, los factores desencadenantes de su desarrollo. Si a las acciones de piratas y corsarios unimos los desastres de la peste podremos entender que tanto el comercio como la pesca y la artesanía tuvieron una errática evolución hasta que en el siglo XVI los armadores de la ciudad consiguieron de la corona la patente de corso
En este contexto histórico tiene lugar la Batalla de Rande (1702), en la que la flota formada por ingleses y holandeses se adentra en las aguas de la ría para hacerse con los tesoros que traía la Flota de la Plata española desde América (a la que asistía la armada francesa), cruento episodio que ha perpetuado Vigo en los libros de historia.
Vigo estaba rodeada por una muralla que la defendía y se abría a siete puertas: Falperra, Berbés, Mar, Laxe, Gamboa, Sol y Placer, que se derruyeron en 1869 para favorecer su expansión.
La oreografía gallega, entre otras circunstancias, provocó el aislamiento secular de las poblaciones y aunque las comunicaciones resultaban dificultosas, con la llegada de comerciantes e industriales catalanes y vascos, atraídos por la riqueza pesquera de las costas, a mitad del siglo XVIII, se inicia el despegue económico relacionado con la pesca y sus derivados. Paralelamente se inicia una lenta mejora de las comunicaciones al realizarse la carretera que lleva a Castilla, un muelle pétreo y con la implantación del ferrocarril en la década de los sesenta del siglo XIX.
Todos los años en Vigo se celebra la fiesta de la Reconquista, en la que se conmemora el levantamiento de los ciudadanos con el fin de expulsar al ejército francés en 1809.
En la segunda mitad del siglo XIX se inició el proceso de crecimiento definitivo de la ciudad. La arquitectura fue el espejo del desarrollo económico, donde se reflejaba la importancia de las transacciones económicas con América en las viviendas de la alta burguesía situadas en las principales avenidas, iniciándose un crecimiento vertiginoso de la población.
El puerto de Vigo, hoy en día unos de los principales puertos pesqueros de Europa, fue el punto del que partieron miles de gallegos que emigraron a América.
Qué visitar en Vigo
Dentro del término municipal de Vigo se pueden observar paisajes de mar y montaña, restos del legado histórico y del definitivo crecimiento de la ciudad a partir de la década final del siglo XIX, momento en que la ciudad conforma una fachada pétrea que la identifica hoy día.
El crecimiento definitivo y la trasformación en gran ciudad comenzaron a fraguarse hace cincuenta años, al convertirse Vigo en foco de los procesos de industrialización intensiva. Podemos distinguir dos tipos de visitas posibles según la clase de recorridos que se quieran hacer: una orientada a conocer el paisaje natural (la ría, las playas o los parques forestales que rodean la ciudad), y otra dirigida a visitar sus principales construcciones y lugares de especial relevancia:
Patrimonio natural
Vigo está rodeada por un anillo de parques forestales, entre los que destacan los de Beade, Valadares, Bembrive, Zamáns, o Candeán. En pleno centro urbano se encuentran los parques de O Castro, A Guía y A Riouxa. Desde ambos se disfruta de magníficas vistas de la ría y una cuidada selección de especies arbóreas. Otro parque urbano ligado a la historia de la ciudad es el Parque de Castrelos o Quiñones de León, que contiene jardines históricos y un pazo, legado a Vigo por la familia propietaria a principios del sigo XX.
Es posible recorrer a pie grandes tramos del litoral: de Bouzas a Alcabre, donde nos encontramos el Museo del Mar, para a continuación llegar a Samil, la playa urbana por excelencia. El paseo puede continuar hasta llegar a la playa de O Vao, un ejemplo de recuperación de flora y fauna marítima.
La ruta por los vestigios arqueológicos debe comenzar en el parque del Castro, donde se conserva parte de un poblado castrexo, origen de la ciudad actual, para a continuación dirigirnos a la villa romana de Toralla, en proceso de musealización. Hoy día se conservan de época medieval tres iglesias románicas: Santiago de Bembrive, San Salvador de Coruxo y Santa María de Castrelos, esta última con interesantes pinturas murales de época renacentista.
Vigo mantiene en su centro histórico con magníficos ejemplos de arquitectura renacentista representados en las casas de Zeta y Figueroa (hoy Instituto Camoes de cultura portuguesa) y sus plazas empedradas que acogieron los mercados de productos al aire libre. Se puede realizar un recorrido por el centro histórico que incluye además la visita a rincones como A Pedra, los restos del baluarte de A Laxe y el paseo por los ejemplos de la mejor arquitectura regionalista y modernista de la pasada centuria en la Alameda y el paseo de Montero Ríos.
Los equipamientos culturales de la ciudad están encabezados por la nómina de museos que se distribuyen en torno a tres rutas, por un lado los museos y centros culturales del centro de la ciudad:
MARCO: Museo de Arte Contemporánea de Vigo Centro de arte contemporáneo con salas de exposiciones dedicadas al arte nacional e internacional en el que se realizan cuidadas exposiciones de tesis.
Casa das Artes: sala municipal de exposiciones temporales.
Centro Cultural Caixanova: Primer espacio para la cultura en la ciudad, fue obra del arquitecto Antonio Palacios.
Centro Sociocultural Caixanova: Nuevo centro de la entidad financiera que cuenta con múltiples salas de exposiciones temporales además de acoger varios auditorios y la colección permanente de arte gallego de Caixanova.
Centro Sociocultural Caixanova: Nuevo centro de la entidad financiera que cuenta con múltiples salas de exposiciones temporales además de acoger varios auditorios y la colección permanente de arte gallego de Caixanova.
Fundación CaixaGalicia: Cuenta con una programación estable en sus salas de exposiciones y conferencias.
Fundación Laxeiro: Museo dedicado a unos de los más importantes pintores de la corriente renovadora del arte gallego que se inició en los años 20.
Fundación Laxeiro: Museo dedicado a unos de los más importantes pintores de la corriente renovadora del arte gallego que se inició en los años 20.
Casa da Cultura Galega-Museo Fernández del Riego: Cuenta con la principal biblioteca sobre ediciones en gallego así como con el legado de las Fundaciones Penzol y Fernández del Riego.
Centro de Artesanía Tradicional: Centro de exposición, desarrollo y recuperación de los oficios de artesanía.
Casa do Cesteiro: Sala de exposición y formación sobre el oficio de la cestería.
Si nos alejamos un poco del centro y nos dirigimos hacia la zona de Pastora-Castrelos podemos ver:
Museo de Castrelos: Singular arquitectura palaciega de origen renacentista que alberga las colecciones de arqueología, historia de la ciudad y arte gallego del siglo XX, así como una colección de primeras firmas de pintura europea.
Museo Olimpio Liste: Museo situado en una construcción burguesa de los años cincuenta que exhibe colecciones de etnografía con un moderno y ameno montaje.
Iglesia Románica de Castrelos: cuenta con pinturas renacentistas en su interior, pudiendo verse en ella un amplio catálogo de elementos decorativos del románico rural.
En la franja marítima se encuentran:
Centro de Artesanía Tradicional: Centro de exposición, desarrollo y recuperación de los oficios de artesanía.
Casa do Cesteiro: Sala de exposición y formación sobre el oficio de la cestería.
Si nos alejamos un poco del centro y nos dirigimos hacia la zona de Pastora-Castrelos podemos ver:
Museo de Castrelos: Singular arquitectura palaciega de origen renacentista que alberga las colecciones de arqueología, historia de la ciudad y arte gallego del siglo XX, así como una colección de primeras firmas de pintura europea.
Museo Olimpio Liste: Museo situado en una construcción burguesa de los años cincuenta que exhibe colecciones de etnografía con un moderno y ameno montaje.
Iglesia Románica de Castrelos: cuenta con pinturas renacentistas en su interior, pudiendo verse en ella un amplio catálogo de elementos decorativos del románico rural.
En la franja marítima se encuentran:
Museo del Mar: antigua fábrica de salazón que se sitúa en un bello paraje de playas y que recogerá todos aquellos aspectos históricos y científicos de la relación de Vigo con el mar.
Verbum, Casa das Palabras: museo interactivo sobre la comunicación humana
Restos arqueológicos de la Villa romana de Toralla: la villa romana de Toralla cuenta con múltiples vestigios del desarrollo de las relaciones entre la población indígena y la romanizada en los primeros siglos de nuestra era.
El ayuntamiento dedica a este tema las siguietes webs: http://www.vigo.org/conecenos/quever.php, y alguna página personal como http://www.arrakis.es/~rojea/, así como lvigo en fotos: http://www.vigoenfotos.com/
Gastronomía
Aunque partamos del tópico de la cocina gallega tradicional en esencia sencilla y elaborada a partir de excelentes y variados productos que poco necesitan de adornos y condimentos, en Vigo se puede disfrutar de cocinas muy variadas para muy diferentes tipos de público y exigencias económicas.
La importancia del puerto pesquero de Vigo permite ofrecer en los restaurantes de la ciudad platos de la mejor calidad a base de pescados y mariscos preparados tanto a partir de recetas de la cocina tradicional gallega como de las más elaboradas recetas de cocina internacional.
Verbum, Casa das Palabras: museo interactivo sobre la comunicación humana
Restos arqueológicos de la Villa romana de Toralla: la villa romana de Toralla cuenta con múltiples vestigios del desarrollo de las relaciones entre la población indígena y la romanizada en los primeros siglos de nuestra era.
El ayuntamiento dedica a este tema las siguietes webs: http://www.vigo.org/conecenos/quever.php, y alguna página personal como http://www.arrakis.es/~rojea/, así como lvigo en fotos: http://www.vigoenfotos.com/
Gastronomía
Aunque partamos del tópico de la cocina gallega tradicional en esencia sencilla y elaborada a partir de excelentes y variados productos que poco necesitan de adornos y condimentos, en Vigo se puede disfrutar de cocinas muy variadas para muy diferentes tipos de público y exigencias económicas.
La importancia del puerto pesquero de Vigo permite ofrecer en los restaurantes de la ciudad platos de la mejor calidad a base de pescados y mariscos preparados tanto a partir de recetas de la cocina tradicional gallega como de las más elaboradas recetas de cocina internacional.
Un listado completo de todos los restaurantes y lugares en los que se puede comer en la ciudad se halla en la sección de gastronomía del sitio vigo.net: http://www.vigonet.com/vigotour/direcciones/direcciones_gastronomia.asp; por su parte, la página http://www.galinor.es/rvigo.html ofrece una selección de los restaurantes más exquisitos de la ciudad
Turismo-rutas
Si seguimos la ruta del Sur llegamos a Baiona A Real, población con marcada tradición marinera adonde llegó la noticia del descubrimiento de América, fecha que se conmemora anualmente en la fiesta de la Arribada. Baiona conserva el sabor de villa marinera con un interesante casco histórico.
Desde Baiona llegamos a A Guarda, población en la que desemboca el Río Miño y uno de los polos de atracción del turismo en Galicia pues está presidida por el castro de Santa Trega, principal yacimiento arqueológico gallego.
El Miño es aquí A Porta, un río que une dos pueblos hermanos. La interesante ruta por las ciudades fronterizas del Miño nos lleva de A Guarda a Caminha, de Goián a Vilanova da Cerveira, de Tui a Valença, de Salvaterra a Monçao, donde podremos rememorar las complicadas relaciones entre pueblos limítrofes en función de una geografía política conflictiva.
Conexión directa con Portugal
Por autovía podemos llegar a Tui, población fronteriza que conserva sus murallas y rivaliza en belleza y estado de conservación con su homóloga portuguesa, Valença.
A solo 150 kilómetros por autopista se encuentra Porto, segunda ciudad en importancia del vecino país y centro económico y financiero de la mitad norte de Portugal. El gran desarrollo cultural que muestra la ciudad, con equipamientos de gran interés como la Casa da Música o la Fundación Serralves han incentivado los flujos de información Galicia-Portugal.
Ruta norte
Siguiendo la A-9 llegamos a Pontevedra, ciudad que conserva uno de los centros históricos más completos de Galicia. Los vestigios de la ruta xacobea están presentes en construcciones como la Iglesia de Santa María o la Peregrina.
El Camino remata en Santiago de Compostela, ciudad Patrimonio de la Humanidad y capital cultural de Galicia. Una catedral en si misma, perfecto ejemplo de convivencia entre pasado y presente que ha sabido crecer y adaptarse a las nuevas necesidades manteniendo una tradición constructiva armoniosa. Aunque Santiago es una ciudad abarcable, los equipamientos culturales son muchos y muy interesantes por lo que no está de más dedicarle varias jornadas.
Siguiendo la A9 llegamos a A Coruña, antigua capital del Reino de Galicia y centro de la tradición financiera. A Coruña se desarrolló afrontando su dificil relación con un paisaje agreste presidido por la Torre de Hércules, antiguo faro romano.
Hoy en día se ha dominado la naturaleza y la península aparece como un paseo accesible en el que destacan las construcciones modernistas en cristal, la Plaza de María Pita, el Castillo de San Antón y la mencionada Torre de Hércules, que conviven con modernos edificios como la Domus.
Xacobeo 04
Aunque existen testimonios que hablan del éxtasis que experimentaron al llegar al Finis Terrae de ciudadanos del imperio romano, las peregrinaciones se iniciaron a partir de la "llegada milagrosa" del cuerpo del Apóstol Santiago traído en una nave por una tripulación angélica desde Palestina y descubierto en el siglo IX.
El inicio del las peregrinaciones supuso además de un fenómeno espiritual un vasto desarrollo cultural y económico. El camino fue también comercial y en él se edificaron vías, puentes, ciudades y se construyeron magníficas iglesias y catedrales, hospitales y albergues para peregrinos.
Los peregrinos llegaban a Santiago de Compostela procedentes de toda Europa definiendo caminos que han llegado hasta hoy día, entre los que destaca el camino Francés, el camino Inglés, el camino Portugués, el camino del Sudeste, el camino del Norte, el de Fisterra-Muxía y la Ruta del Mar de Arousa y Ulla, por donde llegó el cuerpo del Apóstol. http://www.xacobeo.es/
Informaciones que pueden facilitar considerablemente la visita a cualquiera que desee conocer la ciudad de forma asequible: http://www.agalicia.com/vigo/. También en esta dirección se puede encontrar, más allá de la oferta hotelera del Congreso, una ampliación de las posibilidades de alojamiento en diferentes categorías: http://www.galinor.es/hvigo.html
Teneis que visitarnos. Besos a todos.
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